Belén Rodríguez Freire
Este trabajo parte de la idea de dar a conocer lo que sucedió en la ex E.S.M.A. mediante un recorrido visual desde el presente. Transitar los espacios, el afuera y el adentro, tomando como punto de partida el contraste entre la libertad que gozaban los genocidas y el encierro de las víctimas. La calidez de la luz solar, la frialdad de las sombras y la oscuridad. El ruido, el silencio, el caos, la quietud. Cada una de estas imágenes fue tomada en los diferentes espacios de la ex E.S.M.A. Solamente se revelaron -no tuvieron intervención digital-, para que quienes las vean tengan una imagen real de los lugares que quedan, los lugares que nos dejaron. La obra es testimonio fiel de la crueldad y el espanto al que la sociedad argentina procuró no volver nunca más.