Manuel Peralta
En 1984 se creó la Comisión de Derechos Humanos del Personal de CNEA (CDHPCNEA) impulsada desde el personal de la Institución. También se creó para buscar la reincorporación de quienes habían sido separados de sus cargos por razones políticas, gremiales e ideológicas bajo las cesantías o renuncias forzadas. En total 120 trabajadores y trabajadoras fueron cesanteados y a 107 se les aplicó la Ley 3090 (de Prescindibilidad),otros 370 trabajadores y trabajadoras se vieron obligados a renunciar. Esta persecución continuó con la redacción de 512 legajos (“ideológicos”) en mano de las autoridades de la institución, papeles que se traspapelaron y desaparecieron en democracia. 22 compañeras y compañeros fueron detenidxs-desaparecidxs; Antonio Anselmo Misetich,Daniel Eduardo Bendersky, Daniel Lazaro Rus, Eduardo A. Pasquini, Federico Eduardo Álvarez Rojas, Gerardo Strejilevich, Graciela Mabel Barroca, Héctor A. Abrales, Jorge Israel Gorfinkiel, Jorge Luis Badillo, José María Estévez, Juan Pedro Barrientos, Manuel Mario Tarchitzky, Marcelo Daniel Kurlat, María Cristina Onis, Miguel Ángel Gil, Miguel Francisco Villarreal, Miguel Schwartz, Roberto Ardito, Rosa Delfina Costa, Secundino Garay, Susana Flora Grynberg. En este proyecto se busca reflejar el sentido de pertenencia que depositaban en sus espacios de trabajo. Dando como resultado en el tiempo una creación plural de las identidades, rompiendo con el carácter institutivo del archivo y creando una mirada instituyente, motor básico para una memoria social-barrial.